Friday 24 June 2011

Del enésimo ejemplo de proofiness

Hoy el Consejo de Ministros ha decidido que podemos volver a conducir a 120. Ha salido el Vicepresidente Rubalcaba y tras asegurarnos que ha habido un largo debate sobre tan apasionante asunto, parece que se han puesto de acuerdo en quitar las pegatinas de las señales. Luego, sin cortarse un pelo, ha manifestado que nos hemos ahorrado 450 millones de euros.

Cómo mola. Naturalmente, Rubalcaba no tiene ni puta idea de lo que se ha ahorrado con esa chorrada, pero da una cifra. Ah, el magnetismo de los números. Oyes la cifra y tu subconsciente admite que debe ser cierta. Si hubiera dicho "nos hemos ahorrado una pasta" la gente pensaría "buahhhh". Pero no, oyes "450 millones" y el cuerpo te pide creerlo, aunque creer a alguien del Gobierno a estas alturas sea una cuestión más de fe (socialista) que de otra cosa. Rubalcaba , es obvio, puede ser muchas cosas (malas la mayoría) pero tonto no.

El infame senador McCarthy, el de las persecuciones a comunistas en USA, tampoco era tonto. Intervino en el Comité del Senado y manifestó que tenía una lista con 205 comunistas que trabajaban en el Departamento de Estado. No dijo "muchos", ni "algunos", sino 205, ni uno más ni uno menos. La cifra era una invención, pero coló y el americano de a pie se creyó que el Gobierno estaba infestado de rojos, igual que, a lo mejor, el españolito de a pie se cree la milonga de don Alfredo. Si me perdonais la pedantería, esto en inglés se llama "proofiness".

El año pasado cuando estaba de vacaciones en Australia, pensé que era un país sin problemas porque en la campaña electoral se hablaba sobre todo del ancho de banda de Internet. Hoy, aquí, podía haber pensado lo mismo. Nuestro Gobierno debatiendo sobre si 110 o 120, todo debe ir genial. ¿Qué habrá defendido Pajín? ¿Y Valeriano Gómez? Lástima que las deliberaciones sean secretas, porque estoy en un grito.

La prima de riesgo está casi en un 3%. A lo mejor sí que tenemos problemas. Pero yo estoy tranquilo. Ya puedo volver a correr a 120 cuando vuelva a casa. Y noe hemos ahorrado 450 millones y algunos céntimos. Dios, ¿qué haríamos sin nuestros próceres?

Saludos a todos

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